Amigos de @Holos-Lotus, me he comprado esta licuadora con parte de las recompensas de Hive, yo diría que con el 30% de lo optenido en cinco meses.
En el vasto universo de las comunidades digitales, existen espacios que trascienden el mero intercambio de información y se convierten en terrenos fértiles para el crecimiento personal.
Mi experiencia en @Ecency, particularmente dentro de la blockchain de Hive, ha sido un viaje revelador que entrelaza lo espiritual y lo material. Lo que comenzó como un acto de curiosidad se transformó en un camino de superación de miedos, gratitud compartida y, finalmente, en la materialización tangible de mis esfuerzos.
La interacción en comunidades digitales puede ser un espejo de nuestro desarrollo integral, donde cada like, comentario o recompensa no solo valida nuestra presencia, sino que también nutre nuestros sueños. Y para hacer este tema más hogareño, les preparo un jugo de mango mientras conversamos.
Al mirar atrás, reconozco que los primeros pasos en Hive, desde aquel 7 de diciembre, estuvieron teñidos de incertidumbre. El miedo a lo desconocido, a no ser recibido o a fracasar en el intento, es una sombra que acompaña todo nuevo comienzo. Sin embargo, ese temor no me paralizó; al contrario, se convirtió en combustible.
La satisfacción de interactuar, de ser parte de una "gran colmena" donde el apoyo es recíproco, me enseñó que la vulnerabilidad es el primer peldaño hacia la fortaleza espiritual. La comunidad @Holos-Lotus se volvió un refugio donde compartir no es solo un acto de exposición, sino de confianza en un proceso colectivo.
Siempre que veo un comentario de @Charjaim, @lilianajimenez, @damarisvibra o @emiliorios me llena de satisfacción como si su mano en mi hombro me hicieran saber que vale la pena intentarlo porque ellos son el ejemplo.
Mi gratitud no es un simple gesto de cortesía, sino una práctica espiritual que amplía mi conciencia de cómo y para qué llegué hasta aquí. Ese camino lo he transitado acompañada de @maylink que también ha sido brújula de muchos usuarios. He tenido manos amigas brindándome su luz, @yecier, @nanixxx, @claudiocruz.
Al agradecer, reconocemos que nada de lo logrado es únicamente mérito propio, que debemos retribuir a otros que encuentran en Hive un espacio para sus palabras y emociones, ese regocijo lo siento cuando veo leo los textos de algunos que ayudé a iniciarse y ya navegan solos. Otros que encontré en este hogar me calan cada día con fabulosos textos y ya los siento cercanos como @marabuzal.
En Hive, cada voto o comentario retribuido es un recordatorio de que el crecimiento es una red interdependiente. Esta dinámica refleja una verdad más profunda: lo material y lo espiritual no son dimensiones separadas. La energía que invertimos en crear, apoyar y colaborar se manifiesta, tarde o temprano, en frutos concretos.
Esta licuadora, o batidora, adquirida con mi tercer cobro en Hive simboliza la materialización de un esfuerzo persistente. Más que un electrodoméstico, es un objeto cargado de significado: representa el "resultado Hive", así lo llamé. Es la prueba de que los espacios digitales, cuando se abordan con intención y constancia, pueden ser plataformas para cumplir metas tangibles. La planificación y el crecimiento dentro de la comunidad no solo alimentaron mi cuenta virtual, sino también mi autonomía y mi capacidad para transformar lo abstracto en lo concreto.
A esta seguridad ha constribuido @canje que con su rápida y efectiva respuesta nos hace llegar cada cifra a nuestras manos.
Esta experiencia resume una enseñanza vital: el crecimiento personal es un diálogo constante entre lo interno y lo externo. La comunidad digital fue el espejo donde mis miedos se confrontaron, la gratitud se cultivó y los sueños tomaron forma.
La licuadora es solo el principio; cada nuevo paso en Hive refuerza la idea de que, cuando nutrimos nuestro lado espiritual, mediante la conexión auténtica y el agradecimiento, lo material responde en consecuencia.
Con este sencillo y asombroso jugo de mango, festejo con ustedes el resultado de este período La receta está en seguir creyendo que cada clic, cada palabra y cada gesto de comunidad son semillas de un jardín que florece en ambas dimensiones: la del alma y la del mundo tangible.
¡¡¡Brindemos!!!
Y constribuye al crecimiento de @Holos-Lotus con delegación o compartiendo un % de tus recompensas, yo lo hice desde esta publicación. 🥳
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English
From Seed to Fruit
Friends of @Holos-Lotus, I bought this blender with part of my Hive rewards, I'd say 30% of what I earned in five months.
In the vast universe of digital communities, there are spaces that transcend the mere exchange of information and become fertile ground for personal growth. My experience at @Ecency, particularly within the Hive blockchain, has been a revelatory journey that intertwines the spiritual and the material.
What began as an act of curiosity transformed into a path of overcoming fears, shared gratitude, and, ultimately, the tangible realization of my efforts. Interaction in digital communities can be a mirror of our integral development, where each like, comment, or reward not only validates our presence but also nourishes our dreams. And to make this topic more homey, I'll make you a mango juice while we chat.
Looking back, I recognize that the first steps in Hive, since that December 7th, were tinged with uncertainty. The fear of the unknown, of not being welcomed, or of failing in the attempt, is a shadow that accompanies every new beginning.
However, that fear didn't paralyze me; on the contrary, it became fuel. The satisfaction of interacting, of being part of a "great hive" where support is reciprocal, taught me that vulnerability is the first step toward spiritual strength.
The @Holos-Lotus community became a refuge where sharing is not just an act of exposure, but of trust in a collective process. Whenever I see a comment from @Charjaim, @lilianajimenez, @damarisvibra, or @emiliorios, it fills me with satisfaction, as if their hand on my shoulder were letting me know that it's worth trying because they are the example.
My gratitude is not a simple gesture of courtesy, but a spiritual practice that broadens my awareness of how and why I got here. I have walked this path accompanied by @maylink, who has also been a compass for many users. I have had friendly hands shedding their light: @yecier, @nanixxx, @claudiocruz.
When we give thanks, we recognize that nothing we have achieved is solely our own merit; that we must give back to others who find a space in Hive for their words and emotions. I feel that joy when I see and read the texts of some I helped get started and are now navigating on their own. Others I found in this home touch me every day with fabulous texts, and I already feel close to them, like @marabuzal.
At Hive, every returned vote or comment is a reminder that growth is an interdependent web. This dynamic reflects a deeper truth: the material and the spiritual are not separate dimensions.
The energy we invest in creating, supporting, and collaborating manifests, sooner or later, in concrete results. This blender, or mixer, purchased with my third Hive checkout symbolizes the materialization of persistent effort. More than an appliance, it's an object laden with meaning: it represents the "Hive outcome," as I called it. It's proof that digital spaces, when approached with intention and consistency, can be platforms for achieving tangible goals.
Planning and growth within the community not only fueled my virtual account, but also my autonomy and my ability to transform the abstract into the concrete.
@canje has contributed to this security, with its rapid and effective response, ensuring that each figure reaches us.
This experience encapsulates a vital lesson: personal growth is a constant dialogue between the internal and the external. The digital community was the mirror where my fears were confronted, gratitude was cultivated, and dreams took shape.
The blender is just the beginning; each new step in Hive reinforces the idea that when we nourish our spiritual side through authentic connection and gratitude, the material world responds accordingly.
With this simple and amazing mango juice, I celebrate with you the outcome of this period. The recipe lies in continuing to believe that every click, every word, and every gesture of community are seeds of a garden that flourishes in both dimensions: that of the soul and that of the tangible world.
¡¡¡¡Cheers!!!
Y Contribute to the growth of @Holos-Lotus by delegating or sharing a % of your rewards, I did it from this post.
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